Por el momento, el acuerdo no contempla a los adolescentes que asisten a establecimientos subvencionados y que perdieron el boleto sin costo hace tres meses, pese a que la ley provincial los incluye en el beneficio.
Tras una reunión entre funcionarios municipales y representantes de la empresa Costa Azul, las familias que reclaman desde hace meses el restablecimiento de los boletos estudiantiles en los micros de la firma, transporte que muchos adolescentes toman para asistir al secundario en localidades cercanas, recibieron este jueves una buena noticia: los estudiantes de Mar del Plata y Batán que estudien en escuelas públicas de Otamendi mantendrán el beneficio y podrán viajar gratis.
Sin embargo, la alegría es parcial. Por el momento, el acuerdo no contempla a aquellos que asisten a establecimientos subvencionados, que perdieron el boleto sin costo hace tres meses pese a que la legislación provincial los incluye dentro de los beneficiarios del Boleto Estudiantil, o a quienes estudian en establecimientos educativos de otras localidades bonaerenses que no sea Otamendi.
Por este motivo, las familias afectadas, que habían mantenido reuniones en los últimos días y programado un encuentro “multitudinario” para el próximo martes en el Consejo Escolar, aseguraron a LA CAPITAL que continuarán con los reclamos. “El acuerdo no incluye a los estudiantes de escuelas subvencionados y otros tramos en ruta 2, para los que van hasta Vidal y ruta 11, que estudian en Miramar. No son solo los chicos de Batán que estudian en las públicas de Otamendi”, aseguraron Analía y Celeste, dos de las madres que llevan adelante la protesta y que aseguran que el número de afectados por la quita del beneficio supera ampliamente las 200 personas.
Este jueves, desde el ejecutivo municipal informaron que se había llegado a un acuerdo con la empresa Costa Azul para solucionar el conflicto que afectaba a los estudiantes que estudiaban en la ciudad vecina de Otamendi, logrando que se garantice el pase gratuito para aquellos que asistan a escuelas públicas de esa localidad.
Sin embargo, sobre la posibilidad de avanzar en la resolución para la población de escuelas subvencionadas y las que viajan a otras localidades, el secretario de gobierno, Alejandro Vicente, aseguró a La Capital que el anuncio “por el momento, es solo las escuelas públicas”.
De todas maneras, el funcionario garantizó que el acuerdo alcanzado “es solo el primer paso”. “Vamos a seguir hablando (con la empresa) pero no se puede asegurar nada hasta el momento”, advirtió.
En este contexto, la comunidad educativa involucrada en el reclamo aseguró que continuarán con el “plan de lucha”, que incluye, entre otras acciones para visibilizar la problemática, una reunión con todas las familias afectadas el próximo martes a las 10 en las oficinas del Consejo Escolar.
Los pases gratuitos que cuentan todos los estudiantes a partir de la ley provincial N°14735 comenzaron a verse amenazados hace tres meses, cuando la firma Costa Azul -que tomó las rutas de la Rápido del Sud, que se presentó en quiebra- dejó sin efecto este beneficio para quienes asistían a establecimientos subvencionados y éstos pasaron a abonar el pasaje con un descuento del 20%. Dependiendo de las distancias, los pasajes pasaron a valer desde $35 a $60 sólo de ida. Los alumnos de colegios públicos, en tanto, iban a dejar de contar con el pase gratuito a partir de noviembre.
Esta situación genera serios inconvenientes en varias localidades de la provincia que, sin posibilidad para abastecer la demanda de estudiantes secundarios, muchos de los jóvenes residentes en esos lugares se ven obligados a trasladarse todos los días a ciudades vecinas para terminar sus estudios. Y lo hacen a través de la única firma a cargo de muchas de las rutas internas: Costa Azul. Según señalaron algunas familias afectadas, el quite del beneficio sumado a la difícil situación económica actual, llevó a que las escuelas empiecen a permitir el trabajo desde la casa. En algunas casas con más de un hijo en edad escolar llegaron a “turnar” la asistencia a la escuela de los hijos, ante la imposibilidad de afrontar la totalidad de los pases diarios.